domingo, 7 de febrero de 2016

La Tierra Media: Sombras de Mordor

Título: La Tierra Media: Sombras de Mordor
Desarrolladora: Monolith Productions
Fecha de lanzamiento: 30-09-2014
Plataformas: PC, Xbox 360/One, Ps3/4
Jugadores: 1 Jugador


Sinopsis:

Talion, un montaraz gondoriano se ve asaltado por secuades del Señor Oscuro Sauron, una sangrienta lucha que termina con la muerte de su esposa e hijo... y la suya propia.
Lo que Talion no sabía es que a él se le negaría la muerte, pues un espíritu elfo ocuapará su cuerpo, otorgándole habilidades superiores.
Ahora ambos seres: montaráz y espíritu cooperarán para cobrarse juntos una venganza contra Sauron.

Análisis:

Sombras de Mordor es una historia inventada con tal detalle y coherencia que, aunque no pertenezca a la novela original de Tolkien, nadie diría que no es suya.

La historia nos sitúa de la Puerta Negra, mientras el tutorial nos enseña a pelear con nuestro hijo, los uruks (orcos con muy malas pulgas) nos asaltan, matan a nuestra familia y a nostros. Entonces es cuando Celebrimbor, el espíritu elfo se apodera de nosotros y nos confiere unos poderes mayúsculos.



Es aquí donde está la guinda del juego: si eliminamos esto el juego no deja de ser un sandbox por el que te moverías a golpe de espada



Las habilidades del espectro van desde disparar flechas fantasmales (que viene a ser flechas normales y corrientes... al principio) hasta poseer mentes, y serán útiles cuando nos veamos rodeados de hordas y hordas de uruks malhumorados.

Se implanta un sistema de jeraría dentro de los secuaces de Sauron. Uruks liderados por comandantes y estos liderados por caudillos, pero la naturaleza de estos les incita a traicionarse entre ellos en una lucha constante por el poder, para escalar puestos y demostrar quién es el más fuerte.




Es un juego que está vivo, me explico: un soldado raso que nos mate puede ascender a capitán si hay un puesto libre para ello, por ende se les concederá un aumento de atributos, lo que los hará más difícil de derrotar la próxima vez que nos veamos, porque sí, aunque muramos hay que recordar que ya estamos muertos, no podemos morir otra vez (redundante, sí) por ende si nos matan reviviremos una, y otra, y otra vez.



Una vez resucitados ese uruk que nos mató nos recordará, sabrá que somos al que mató, si conseguimos derrotarlo tendremos la opción de obtener la información del resto de capitanes para conocer sus puntos fuertes y débiles al principio, según avancemos en la historia podremos poseer su mente para que combata junto a nosotros en vez de simplemente usarlo como medio de información, haremos que nuestro capitán ascienda hasta caudillo.

Valoración:

Lo mejor:
-Explorar Mordor.
-La sensación de poder meter el miedo entre los uruks.
-Controlar tu propio ejército.

Lo peor:
-Llega a ser repetitivo.
-La poca variedad en las misiones.
-En resumidas cuentas, que siempre es igual.

Gráficos: Para ser de nueva generación se ve peligrosamente como los de las viejas consolas.
Jugabilidad: Un Assassin's Creed, ambientado en la Tierra Media, con la dificultad que un Assassin's Creed debería de tener.
Duración: Corta, demasiado corta. Incluso con las misiones secundarias el juego se ventila pronto. Aún así es intenso.

Sombras de Mordor, es un juego que para aquel que sea fan de los libros de Tolkien lo disfrutará como un enano. Nunca mejor dicho.