Desarrolladora: Fromsoftware
Fecha de lanzamiento: 12 de Abril de 2016
Género: Acción RPG
Plataformas:PlayStation 4, Xbox One, PC
Jugadores: 1
Sinopsis
Adentrarte en un universo lleno de enemigos y entornos descomunales, un mundo en ruinas en el que las llamas se están apagando. Sólo quedan las ascuas...
Análisis
Al final me pude hacer con la última entrega... si preguntamos en la comunidad de jugadores si conoce esta saga, la gran mayoría nos dirá que sí, y es que el tiempo pasa para todos, ya no es como hace unos años, ahora la saga Souls ya es reconocida entre muchos, yo mismo al principio no la conocía, lo descubrí y ahora no puedo evitar jugarlos (salvo el Olvidado Demon Souls, por desgracia).
Nos ponemos en situación: siguiendo el método de inmolarse en la llama original para mantener la Edad del Fuego vigente, todo ser vivo ("vivo") se ha dado cuenta de que extender esta edad de forma artificial no puede ser bueno, sobre todo para el que se inmola, no habiendo ahora ningún ser con las humanidades necesarias para hacerlo.
¿Qué solución se toma? Sencillo, cogen a los señores de la Ceniza de ciclos anteriores que se quemaron estilo "bandera y por la patria" para que, sí, se vuelvan a quemar, para el capricho de unos pocos de mantener la llama encendida.
Obviamente los cenizos no quieren volver a quemarse, entonces mandan al pelele de turno a traerlos aunque sea a rastras, y sí, ese pelele somos nosotros.
Nos patearemos medio mundo en llamas para traerlos de vuelta a golpe de espada, y ¡menudo mundo!
Digo esto porque lo perdido en Dark Souls 2 se ha recuperado, ya no son pasillos conectados entre sí como buenamente se pudo, ahora todos los escenarios tienen su miga, su coherencia, sabes perfectamente dónde te encuentras con sólo mirar la lontaranza, te asomarás a un acantilado, y verás las zonas que has pasado, y las que te quedan, es, sencillamente, aluciante.
Y es que eso es lo malo que tenía su hermano mayor, los fondos eran imágenes puestas, al más puro estilo Final Fantasy VII, ahora no, ahora te dan la sensación de sentirte pequeño, que un mundo inmenso te rodea, que incluso puedes llegar a visitarlo.
El estilo de combate se mantiene, pero incorporando las mecánicas de su primo Bloodborne, la velocidad del combate se vuelve más frenética, sin olvidar la estrategia y las mecánicas básicas de los Souls, como la estabilidad, la velocidad dependiendo de la armadura, aunque estas vayan por su cuenta (ejemcaballerocaidoejem).
Se mantiene el sistema de los frascos de estus mejorables hasta +10, y se incluye ahora un frasco de estus de ceniza, que nos devolverá el maná (no me importa si se llaman PC, la barra azul desde siempre es maná), pudiendo ahora distribuir los frascos a tu antojo, si pensabas llevar 10 frascos de cada estus te acabo de chafar el día, tendrás que pensar cuántos necesitas de cada. Aunque siempre puedes hacerte guerrero, liarte a mamporros con todo el que se te cruce y pasar de la magia.... ¿verdad?
El sistema online se ha mejorado desde Bloodborne, se han eliminado las campanitas y se han vuelto a poner las señales de invocación, (¡como tiene que ser!), para mi gusto el cooperativo va como la seda, es perfecto, aunque se ha perdido ese respeto, ese honor que había en las anteriores entregas, ahora ha sido sustituido por una paliza gitana de 3 contra 1 donde al matarte-curarse-impedir que te cures se reirán de ti y te enseñarán sus posaderas gracias al gesto del calvo Patches.
Los jefes también han heredado del otro juego sangriento muchas mecánicas, eso de "si es grande es lento" se acabó, los jefes grandes te van a dar la del pulpo del mismo modo que un jefe chiquitajo, aquí hay amor para todos, y se potenciarán a mitad del combate, para que no te aburras por si ves que la curva de dificultad no es muy elevada.
Claro está, siempre tendremos los 3 tipos de jefe: los que dan la risa, los difíciles y los que ya puedes rezar a tu dios para que se quede bugeado o algo y poder ganarle.
Las humanidades han desaparecido, y el estado hueco ha pasado a un segundo plano, siendo ahora un Latente que pierde su ascua cada vez que muere, y el ascua viene a ser un plus de vida temporal mientras no te maten, eso y que tu ropa esté en llamas.
Aunque he mencionado la curva de dificultad, sí que es verdad que este es el más fácil de todos los lanzados al mercado.
OJO, he dicho el más fácil, no sencillo, seguimos hablando de la gallina de los huevos de oro de From Software, va a seguir siendo difícil, no confundamos las cosas.
Valoración
Lo mejor:
-Un nuevo reino, con una historia muy profunda y oculta.
-Los escenarios
-Un cierre magnífico a la trilogía.
Lo peor:
-Para el que venga desde los primeros juegos, es otro Dark Souls, pero de Next Gen.
-Las esquinas atravesables con flechas, de verdad que eso jode.
-La falta de honor en cooperativo
Gráficos: Estos juegos nunca destacarán por sus gráficos, pero aún así destacan por crear un mundo tan complejo, bello y a la vez oscuro.
Jugabilidad: La de todos los souls, pero más rápida.
Duración: Para mi gusto, me parece el más corto de los 3, además el NG+ no es que incluya muchas mejoras, no me convenció mucho esta parte.
No me malinterpretéis, lo estoy jugando en NG y estoy disfrutándolo igual o más que antes, sigue siendo un buen juego, pero si ya vienes de darte de leches con los anteriores jefazos este no te pilla por sorpresa, cualquier rincón, precipicio, objeto, o trampa ya no te sorprenderá (o casi), y aún así sigue siendo un juegazo que hay que jugar sí o sí, pero cierto es, que, si nunca has disfrutado de ningún Souls, deberías de empezar por éste. Sin lugar a dudas, recomiendo mucho este juego, y yo me vuelvo al NG+
Ah y sí. Praise the Sun!
